Nuestros últimos cuatro títulos estarán en el Stand 304, Pabellón azul, de Gandhi Galerna.
Colección Novela
Alguien en ninguna parte, de Diego Aristi López
Novela
 corrosiva, luminosa y terrenal, narra la historia de un ácrata de 
setenta y un años, un verdulero llamado Manuel Torres. Su mujer fue 
violada y asesinada por dos hijos de puta tras un robo en su propia 
casa. Pasaron dieciocho años y uno de los asesinos sale de prisión. El 
viejo lo busca, infructuosamente. Por fin lo encuentra en una morgue: 
“un trabajo prolijo”, un tiro en la nuca. Pero los muertos no hablan, y 
el viejo conducirá una brava del ´68 hacia el sueño de la venganza. Con La Yumba de fondo, partirá solo. Como el Angelus Novus de
 Paul Klee, se pondrá de espaldas a la historia y al territorio que lo 
produjo, esa “fábrica de pelotudos gobernada por sádicos”, buscando 
salirse de esa vieja prisión que es la injusticia. 
El
 otro héroe de la novela será Echevarrieta, un Dr. House atrapado en un 
feudo, un Jekyll que bebió en una sola noche todo lo que se bebe en la 
Santa María de Onetti. Ambos se cruzarán en la Provincia de Tucumán, y 
el médico le vomitará su teoría de la involución a Manuel Torres. 
También le confesará la única solución posible, el antídoto en el que 
trabaja. Entre ambos, desolados y subidos a un territorio caníbal, más 
una extraña y sensual mujer llamada Ceres, urdirán una historia que 
tiene a Macbeth y Los siete locos como antecesores directos de una serie donde Alguien en ninguna parte sería el tercero de un par perfecto.
Diego Aristi López nació en Buenos Aires en julio de 1975. Publicó también Los manuscritos del monte Richardson (Cave Librum, 2013).
 
Colección Cuentos
Parando en todas, de María Laura Frecha
Cuentos
 que nos llevan de viaje, al camino. Ambientados mayormente en la 
periferia de la de ciudad de Buenos Aires, los trece cuentos de Parando en todas sorprenden
 por una escritura que adquiere a lo largo de la lectura un aura de 
clasicismo rioplatense, y el elenco de personajes de prosapias diversas:
 militantes, marginales, profesionales, trabajadores, exiliados en 
tiempos de dictadura militar, cumple descarnado su función en estas 
historias que se asemejan a episodios de una historia mayor apenas 
insinuada.  
Es
 un libro sin mezquindades ni contemplaciones. En un viaje que nos 
atraviesa y nos nombra, cada uno de estos cuentos nos cincela y delata.
María Laura Frecha nació en Buenos Aires en marzo de 1960.
 
Colección Precipicios (poesía y afines)
El año que fui homeless, de Paula Novoa
Los poemas de El año que fui homeless,
 entre el juego poético y la crónica minimalista, conforman un relato 
hecho de susurros que nos termina dejando una invitación: contemplar el 
mundo con ojos entrecerrados. Los mismos que usamos para dar el beso tan
 deseado, los mismos que nos devuelven una y otra vez la
 pregunta acerca de nuestra vida. Imágenes y palabras se transforman en 
esas chispas que nos alejan de la quietud tan parecida a la muerte.
 
Paula Novoa nació en San Antonio de Padua en marzo de 1976. 
El silencio rebelado, de Gustavo Gareiz
Hay
 poemas que dibujan emociones a través de pinceladas de palabras, que 
garabatean sensaciones y nueva poesía, sólo si el alma del lector está 
dispuesta a abandonar estereotipos de rimas y consonancias. Ayer
 como hoy, el poeta busca en la magia de los recursos literarios alguna 
alquimia que le posibilite transformar las emociones que lo desbordan en
 conceptos e imágenes que se derraman sobre el que lee.  Y entonces el 
lector se ve embebido de los sonidos que Gustavo Gareiz nos hace llegar 
desde El silencio rebelado. Así, logra trastocar la profundidad 
del instante real, sin puntos ni pausas. Así, nos interroga y nos sacude
 la pereza emocional, para llevarnos desde Imperativos, un primer
 poema que nos propone salir de todo (hasta del sol) hacia otros 
territorios donde los vacíos nos sacuden con sus incertidumbres. El recorrido por estos poemas ha sido entretejido por el autor como un grito creativo que, imperativamente, nos deja su huella. 
 
Gustavo Gareiz nació en Isidro Casanova en 1975 y vive en Morón.