Los manuscritos del monte Richardson, de Diego Aristi López
Sinopsis: Al término de esta breve presentación, el lector se encontrará con la crónica de una expedición a una isla del Atlántico sur llevada a cabo hace poco más de un cuarto de siglo. Advierto complacido que nada tienen que ver los hechos que en ella se narran con las muchas relaciones escritas, infinitamente versionadas, sobre esta isla, víctima tanto de la imaginería de los navegantes en sueños de los siglos XVIII y XIX como de la fama que le dio un faro inútil y efímero. El manuscrito que se reproduce en las páginas siguientes relata la emigración de los sobrevivientes de la inundación del Desierto (54) A, que quedó bajo las aguas tras la explosión en 2084, al noreste del mismo, de la muralla de represas del Acuífero Sudamericano. Comparto el recuerdo de que a esta tragedia se le sumó, tan sólo días después, el recalentamiento del Yacimiento Antártico, lo que trajo como consecuencia el desprendimiento de grandes masas de hielo que atravesaron el Atlántico hasta el Ecuador e, inclusive, llegaron hasta los océanos Pacífico e Índico. A ambas catástrofes se enfrentaron los protagonistas de esta historia. Esto nos adelanta el Capitán de Batiscafo de United Planet William O´Really en el prólogo que escribió al primer manuscrito hallado en el monte Richardson, publicado en 2111.
Futurista y arcaica, apocalíptica y compasiva (aunque para nada complaciente), local, planetaria y hasta intergaláctica, esta nouvelle polifónica e irreverente navega, al igual que sus protagonistas, por las aguas de la parodia hasta el desparpajo. Y su estructura nada tiene que envidiar al mecanismo de un reloj suizo: todas las piezas del rompecabezas encajan a la perfección en un desenlace poético tan crudo como exquisito.
Diego Aristi López nació en Buenos Aires a fines de julio de 1975.